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En general ningún muchacho hetero se plantea abrir su trasero completamente a fin de que un ignoto le meta la polla, y mucho menos en la calle a la vista de todo el planeta. Mas este muchacho melenudo y latino precisa dinero para continuar pagándose la universidad y está agobiado, puesto que no halla trabajo. En el momento en que un tío que va con una cámara le ofrece pasta a cambio de grabarle mientras que le clava la polla, no se puede resistir y sacrifica la virginidad de su trasero, algo que indudablemente terminará haciendo nuevamente ahora que ha visto lo simple que es hacer dinero follando.