0 views
La tetuda con ganas de sexo que vive en esta mansión se aburre de una manera mortal. Está todo el día tomando el sol y escuchando música sin localizar más incentivo en la vida. Con lo que cuando ve al técnico de la piscina y de qué manera la mira con ganas de follársela, la tía se le insinúa a saco con la pretensión de que le meta un buen pollazo, la folle fuerte y que eso quede entre ellos como un secreto muy privado. El marido trabaja y jamás va a saber lo puta que ha sido su esposa follándose al agraciado de la piscina.