Comiéndole el trasero a la vecina en la cocina ¡Que exquisitez!
No hay solamente sabroso que degustarle el trasero a una mujer. Muchos tíos no lo hacen, a muchas mujeres les da vergüenza en el momento en que un hombre desea lamerle el ano mas la verdad, es que las putas lo gozan mucho. Esta tía, viendo que su marido la follaba con mucho respeto, busco a un hombre que si la satisficiera por completo. El vecino era el aspirante. Ella veía en el chico un hombre fuerte, que goza a una mujer hasta el por completo, sin sentir asco en meterle la lengua en el culo. La tía invito al pelado a su casa cuando su marido estaba de viajes, con lo que, aprovechando que la casa estaba sola para ella solita, la perra se puso en 4 patas sobre el mesón de la cocina, empinando ese sabroso trasero que tiene y dándose de comer al chico ¡Uff! que buena esta la perra.
