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Acá tenemos a tres putas rebeldes que en vez de asustarse con el guarda de su instituto va y le tiran al suelo de un empujón, y es que sus madres las han enseñado a hacerse respetar, tanto es con lo que ahora se creen más duras que ningún hombre, el guarda las ha hablado mal y eso basta para tirarle al suelo y ponerle el coño en la boca, entonces se lo follan hasta el momento en que eyacula y le dejan allá tirado. WTF!. Pequeñas violadoras, eso es lo que esta ahora brotando en el país nipón, las pobres muchachas que eran violadas ahora son las agresoras…
