Personal shopper deja que un cliente del servicio insatisfecho le meta la polla por el trasero

Anteriormente la mujer que instruyó a esta personal shopper en su trabajo le afirmó que había ciertas cosas esenciales entre las chicas de su profesión. Una de ellas es que si se hallaban con algún cliente del servicio insatisfecho deberían hacer lo que fuera preciso a fin de que el hombre en cuestión no las despidiese. Conque esta joven, cuando descubre que su cliente del servicio está molesto por el servicio que le ha dado, deja que le meta la polla por el trasero. Eso es lo que sabe que debe hacer a la vista de que tiene un buen culo tragón en el que entra cualquier clase de polla con sencillez.