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Tras haber tenido alguna mala experiencia follando por el trasero, esta morena está presta a dejar atrás el temor y el dolor para empezar a gozar de ello. De ahí que llama a un tío que tiene mucha experiencia en la materia y con el que tendrá una sobredosis de sexo anal de lo más agradable que va a hacer que al final el orificio de su ano se quede tan flexible que pueda joder cuando desee por él a lo largo de horas sin llegar a sentir ninguna molestia. Si bien hay que decir que la leche no se la tira en el trasero, sino se la suelta en la boca a fin de que se sienta aun un tanto más puta de lo que es.